Teresa Paneque Carreño, astrónoma: “La ciencia es viral, entretenida y debiésemos apostar más a eso”
Autor: institucional|
Con 26 años, Teresa Paneque Carreño ha destacado en la comunidad científica tanto por sus investigaciones en astroquímica como por su habilidad para comunicar temas complejos de astronomía en redes sociales como Tik Tok e Instagram, inspirando a personas en Chile y el extranjero.
En 2024, la astrónoma chilena se convirtió en la primera en adjudicarse la beca 51 Pegasi b Fellowship de la Fundación Hesing-Simons. Además, consiguió una posición en la Sociedad de Fellows de la Universidad de Michigan, la que le permitirá combinar ambas fuentes de financiamiento para seguir impulsando su investigación sobre las condiciones químicas en los entornos de formación planetaria.
En su charla, titulada “Planetas y redes: conectando la ciencia con la sociedad”, realizada este 16 de octubre en el Campus Ñuñoa, Teresa habló en exclusiva sobre su participación en el Congreso Vive la Investigación, además de otras temáticas.
Esta es la primera vez que estás en la UTEM, ¿qué te pareció participar del Congreso Vive la Investigación?
– Estoy muy contenta y agradecida de esta oportunidad y creo que fue maravilloso ver el auditorio lleno, pero sobre todo de distintos estamentos, había gente de todas las ciencias y las carreras. Y creo que esto es importante, porque a veces se ven los esfuerzos de divulgación científica como algo que viene desde una nueva generación, sólo de estudiantes, que se sale de la labor tradicional de la academia, pero cuando vemos docentes que están interesadas/os con hacer un cambio positivo y acercar la ciencia a la sociedad, creo que estamos viviendo un cambio cultural mucho más grande de lo que significa hacer academia y comunicación de las ciencias.
Fue muy grato para mí recibir preguntas relacionadas con mi propia investigación, lo que no es común. Además, supe de muchos proyectos que ya existen desde estudiantes, que en sus distintas ciencias y especialidades buscan comunicarlo con el público. Fue maravilloso en todo sentido, creamos muchas redes, instancias para mejorar y cosas nuevas a futuro.
¿Qué falta para potenciar más la ciencia en nuestro país?
. En Chile se hace excelente ciencia, hay grandes profesionales, con muy buena formación académica, en lo que es Educación Superior y en los postgrados que hacen las universidades chilenas, pero uno puede llegar hasta cierto punto si es que no obtienes los fondos para salir a mostrar tu trabajo, para viajar, para ejercer colaboraciones de la manera que lo exige un mundo globalizado, donde la ciencia se trabaja en equipo y éste es todo el planeta. Entonces, nos faltan fondos para ello, para hacer investigaciones más complejas, que sean más largas.
La otra parte, una vez que la investigación ya esté hecha, también nos falta divulgarla y generar una vía de dos direcciones de comunicación, no sólo que la ciencia y la academia diga lo que ha descubierto, sino que también se puede retroalimentar de lo que las comunidades estén pensando o requiriendo en las distintas especialidades.
Respecto al trabajo que haces en redes sociales, ¿cómo se te ocurrió compartir contenido educativo de manera sencilla para llegar a más personas?
– Estar en redes sociales fue casual en mi vida, se me dio la oportunidad de hablar en distintos medios de comunicación, hablando en particular del eclipse lunar de 2019 y de ahí, como muchas veces pasa, la gente quería buscarme y seguirme, y me cree las redes sociales como un espacio en blanco. Ha sido un proceso de aprendizaje en los últimos años, sobre todo desde 2021, de ver qué es lo que me acomoda y decidir hacer algo que es: Hablar y enseñar.
Siempre quise se profesora y hablar frente a una pizarra. Hoy en día, no es una pizarra, pero es la pantalla de un teléfono y ello me llena mucho a nivel personal, el poder compartir y generar contenido que apoye la labor docente de muchas y muchos docentes que quizás no tienen el tiempo. Con mi trabajo, he demostrado que la ciencia es viral, es entretenida y debiésemos apostar más en eso y creer en las capacidades de nuestras/os jóvenes.
Si hablamos de tu visión del futuro, ¿cómo derribamos la brecha de género en las carreras STEAM?
– Hay varios esfuerzos que se están haciendo yo creo que con bastante éxito hemos visto cómo el porcentaje de ingreso de mujeres en carreras STEAM ha aumentado, incluso en ingeniería y áreas específicas. Yo creo que hay dos cosas que se pueden hacer. Por su puesto, seguir reforzando el interés en edades tempranas, buscar esas vocaciones, dando la oportunidad que las niñas experimenten estas áreas que de otras maneras no llegan a ellas, porque les regalamos juguetes que las enfocan hacia ciertas experiencias laborales, entonces regalemos juguetes, experiencias y programas educativos que tengan que ver con programación, análisis, lógica y con desarrollar esas capacidades que las puedan llevar hacia carreras STEAM.
Por otro lado, también debemos asegurar la permanencia de aquellas jóvenes que elijan eso como su vocación. Esto es crucial, porque no basta con enfocarnos a que entren a las carreras, ya que muchas veces sus entornos han sido más masculinizados y ahí la visibilidad es crucial, los apoyos a las carreras académicas, en el sentido de no sobrecargarlas. Es multifactorial, tenemos que enfocarnos en la infancia, las/los jóvenes y también en quienes eligen este camino.